Chernobyl Series – Capítulo 16 – Día 3 – Piscina y máscaras de gas

En mas de una ocasión, Igor me ha preguntado el por que de una visita de dos días a «La Zona», deduzco de su persistente curiosidad que lo normal es una visita de un día, pero si lo hubiera hecho así no habría visto muchos lugares que se pierden los que vienen en grupos numerosos y sólo una jornada, de todas formas es de lógica matemática, en dos días se ven mas cosas que en uno…

Al primer sitio que vamos en el segundo día de visita a la ciudad de Pripyat es a la piscina, sí, la famosa piscina olímpica con plataformas de salto.

Cuando uno busca por la red información y fotos sobre Pripyat, la piscina Lazurny aparece siempre, es un lugar que nadie deja de visitar, y yo por supuesto lo tenia en el «orden del día».

Antes de pasar a la piscina, debo cruzar una cancha de baloncesto, ya tenía claro que las instalaciones deportivas de Pripyat eran excelentes, pero esto hacía confirmarlo mas.

Al entrar al recinto de la piscina, una sensación de amplitud invade mi cuerpo cuando se tiene delante el enorme foso que albergaba el agua y el techo que la cubre de aproximadamente 15 metros en su parte mas alta.

Accedo por una puerta que me deja prácticamente delante de las plataformas de salto, a las que alguien hábilmente le ha quitado la escalera del primer nivel para evitar que algún estúpido se accidente subiendo.

Quien no ha estado un día por la tarde en una piscina olímpica, aunque solo sea de visita, los cursos de natación, los críos chapoteando en el agua, los gritos, las carreras, la humedad, debió dar gusto poder venir a disfrutar a esta piscina, el riesgo era alto, pero la calidad de vida también.

Voy rodeando la piscina por su bordillo, la verdad es que todo el espacio esta aprovechado para la piscina, ya que apenas queda espacio para andar entre el foso y los altos ventanales laterales.

Muchas partes del recinto tienen humedades, pero éstas causadas por la climatología y no por la actividad deportiva, continúo andando con cuidado de no caer y llego bajo una especie de cronometro analógico colgando de una pared, cerca del cronometro veo una omnipresente estrella roja.

El foso era muy profundo en una parte, justo bajo las plataformas de salto, en esta parte del foso, alguien había bajado y escrito su firma con spray, todo el fondo estaba lleno de escombros, imagino que todos por la intervención humana posterior al accidente, porque no creo yo que los habitantes de Pripyat se entretuvieran en echarlos dentro cuando tenían una evacuación masiva por delante.

Recorro las estancias del recinto y veo los servicios, el gimnasio, los vestuarios, consigo acceder a un nivel superior para ver la piscina desde una posición elevada, la vista desde aquí es impresionante, era real, no estaba mirando una pantalla de ordenador, estaba allí, en la piscina Lazurny.

El siguiente lugar que visito es otro de los obligados en una visita a Pripyat, la sala donde están cientos de mascarillas anti-gas tiradas por el suelo de las que hay miles y miles de fotografías por la red.

Entro a la sala y si Igor no me las señala ni las veo, entre lo oscuro que estaba aquello y el cielo nublado allí no se veía nada, ademas ya van perdiendo su color marrón debido a la gran acumulación de polvo que tienen después de 30 años casi a la intemperie, ya que cristales hay pocos.

Son unas máscaras diferentes a las que podemos encontrar hoy en día, éstas tenían el elemento filtrante al final de un tubo, y no junto a la cara.

Estaban todas extendidas formando una catastrófica alfombra, ocupaban una amplia extensión de la sala, son de color marrón, algunas tienen "buen" aspecto, pero la goma estará muy acartonada, la verdad es que no quiero tocar ninguna y comprobarlo, muchas de ellas aun conservaban todos sus accesorios, como el tubo y el elemento filtrante.

Las máscaras tienen dos cristales para ver, una válvula para la expiración, y la entrada de aire se realizaba a través de un tubo metálico corrugado.

Hay que decir que en algunos blogs se dice que estas máscaras fueron del accidente, pero no es así, son la dotación que había en los institutos para protegerse ante un posible ataque nuclear americano, en las paredes de los pasillos de los centros educativos hay unas ilustraciones informativas que indican como ponerse las máscaras en caso de necesidad.

En esta misma sala había una caja registradora encima de una mesa, donde estoy es en la cantina del instituto número 3 de Pripyat, y esta registradora marcaba el importe de los almuerzos de los alumnos.

Sigo mirando y veo también mascaras colgando de cables de la luz, y a la que me doy cuenta veo a Igor cogiendo mascaras y colgándolas de otros cables de la iluminación de la sala, ya sabéis que estoy totalmente en contra de que se modifique nada de allá donde vamos, pero los guías con la excusa del "arte" y de decorar un poco mas el entorno para los turistas lo toquetean todo, modificando los escenarios como les viene en gana, como si la zona no fuera ya interesante de por si.

Incluso hay una rueda de bicicleta colgando de una pared, imagino que otra "obra de arte" de algún guía...

Igor y yo salimos de la cantina, no nos gustaba el menú de hoy...